Los amantes del vino se enfrentan a la amenaza de la escasez de esa bebida, según un informe de los servicios financieros de la compañía estadounidense Morgan Stanley.
El año pasado, la producción de ese licor cayó a su menor punto en 40 años, según los analistas, lo que hizo que la demanda superase a las provisiones en 300 millones de cajas.
Desde que alcanzara su punto máximo en 2004, la producción global de vino ha caído en los últimos años movida principalmente por el aumento de la afición por la bebida en China y Estados Unidos, donde los niveles de consumo rivalizan con los de Francia